En la mitología griega, Tiresias fue un adivino ciego de la ciudad de Tebas. Era considerado por los antiguos griegos como el adivino más importante y poderoso.
El significado esencial de la figura de Tiresias reside en su papel de mediador: por sus dotes proféticos, media entre los dioses y los hombres; por su condición andrógina, lo hace entre hombres y mujeres; y por la excepcional duración de su vida, entre los vivos y los muertos.
Historia
Tiresias era hijo del pastor Everes y de la ninfa Cariclo. Tuvo dos hijas: Manto y Dafne.
Tiresias era ciego desde joven. Según el mito, su ceguera fue causada por la diosa Atenea quien lo castigó por haberla sorprendido mientras se bañaba o por la diosa Hera, tras mediar en una disputa sobre el placer que tenía con Zeus. En cualquiera de las historias, le fue concedido en compensación el don de ver el futuro y la profecía.
El adivino aparece como un personaje recurrente en todos los fragmentos mitológicos relacionados con Tebas, desde la época de Cadmo hasta la expedición de los Epígonos.
Cuenta Teócrito, en su 24º Idilio, que Tiresias narró la predicción de la gloria futura de Heracles.
Fue Tiresias quien aconsejó que se entregara el trono de la ciudad al vencedor de la Esfinge y, más tarde, sus revelaciones conducirán a Edipo a descubrir el misterio que rodeaba su nacimiento y sus involuntarios crímenes.
Además aparece este adivino en el Canto XI de la Odisea: el héroe Odiseo, con el fin de averiguar las circunstancias en que se desarrollara su regreso a Ítaca, viaja al reino de los muertos para consultar al espíritu de Tiresias.
Su muerte física tuvo lugar durante la toma de Tebas por los Epígonos. El anciano adivino huyó de la ciudad con los supervivientes tebanos y, al hacer un alto cerca de la fuente Telfusa, murió tras haber bebido agua muy fría de la fuente.
Mito
Es considerado como el primer transexual de la historia, según el autor latino Ovidio en su obra Las metamorfosis, Tiresias sorprendió a dos serpientes apareándose, las separó matando con su bastón a la hembra. Hera, disgustada, de inmediato lo transforma en mujer y se convierte en sacerdotisa de Hera. Siete años más tarde, Tiresias volvió a ver a las mismas serpientes en las mismas circunstancias, volvió a golpearlas con su bastón para separarlas matando a la serpiente macho, y al hacerlo, Hera le hizo recobrar nuevamente su sexo de varón.
Significado
La figura mítica de Tiresias combina varios elementos arcaicos: los adivinos ciegos; la interrupción impía de un rito natural (el de una diosa bañándose o el del apareamiento de las serpientes); la relación entre las serpientes y las personas; la ambigüedad sexual, con la existencia de alguien que tiene a lo largo de su vida los dos sexos; la competición entre deidades.