Hay tantas culturas en América, como tiempo y espacio para contarlas. Una de ellas es la Cultura Xinca. Se piensa que los Xincas llegaron como inmigrantes desde Sudamérica a través del Océano Pacífico y que provienen de las culturas andinas que tuvieron mucho contacto con los Mayas.
Los dominios de los Xincas se extendían por el territorio de Santa Rosa, Jutiapa y Jalapa. Su civilización fue descubierta Pedro de Alvarado en 1575 mientras se daba la conquista del territorio centroamericano. Incluso existen registros de aquel contexto escritos por Bernal Días del Castillo, reconocido cronista que narra la fuerza y el espíritu guerrero con la que los Xincas se resistieron a la conquista, siendo uno de los pueblos que más costó dominar.
Lamentablemente no pudieron ante la fuerza española que, dotados de armamentos lograron conquistarlos y fueron obligados a trabajar como esclavos y a escoltar al Pedro de Alvarado mientras se disponía a conquistar lo que hoy conocemos como El Salvador.
En cuando al idioma con el cual se comunicaban los Xincas se sabe que sufrió una especie de extinción debido a las autoridades eclesiásticas de la época, pues en 1780 el Arzobispo Pedro Cortés y Larraz intenta imponer el cristianismo y erradicar el idioma Xinca, lamentablemente esta serie de medidas, sumada a la esclavitud y la movilización a la cual eran sometidos los Xincas terminaron por extinguir la población casi a su totalidad. Después de este suceso histórico la atención hacia esta cultura permaneció indiferente hasta 1996 cuando fueron reconocidos parte de la diversidad cultural de Guatemala.
En la actualidad la etnia Xinca y su idioma están a punto de perderse para siempre, ya que un estudio realizado en 1997 reveló que el idioma es hablado solo por adultos y ancianos que componen un promedio de 100 a 250 personas. Lamentablemente las nuevas generaciones no tienen el Xinca como lengua materna debido a la hispanización; a pesar de ser reconocido en la Constitución y la Ley de idiomas Nacionales.