El Bund de Shanghái es la zona más concurrida del céntrico distrito de Huapong, alojado en la costanera de la capital económica de China. Nace a la altura del Puente Baidú y se prolonga 1.5 kilómetros a orillas del río Hunagpu, ostenta 52 de los edificios de estilo europeo más emblemáticos de la ciudad y se constituye como paseo imperdible para visitantes y viajeros. Para los locales representa la transformación que vive su ciudad en estos tiempos.
Lo que hace al Bund especial es su majestuosa posición frente al río, de cara al barrio futurista de Pudong. El Bund arraiga el contraste de la historia en sus edificios propios de la colonización europea, expresan el revival romántico que evoca por igual lo clásico, lo gótico y lo renacentista.
Y es que el calmo paseo de este barrio de amaneceres azules y crepúsculos dorados revela los avatares que la historia le impuso a la China para llegar a ser el país que es hoy en día. En el siglo XVIII el mundo no podía develar los tesoros de esta tierra, pues el gobierno era oficialmente renuente a cualquier contacto con Europa. Al no poder adquirir por la vía legal el té, la seda y la porcelana que requerían, comerciantes ingleses, en una oscura interpretación de la mano invisible de Adam Smith, obtuvieron estas especies en el mercado negro, ofreciendo a cambio opio de la India. Hacia 1839, la crisis interna del país derivó en que los fumadores habituales de opio llegasen a ser alrededor de 10 millones. Entonces el gobierno decidió entrar en acción. En Gunaghzou se quemaron 20000 cofres de la droga. Indetenibles, los traficantes ingleses exigieron ser compensados por el gobierno chino, que lógicamente se negó; los extranjeros acudieron a su primer ministro, Lord Pamelton no dudó en apoyarlos.
Tras la Primera y Segunda Guerra del Opio que la China libró y perdió, se abrieron bases comerciales en todo el país; en Shanghái, el Bund, que los lugareños conocen como «Waitan» (Orilla de los extranjeros). Posteriormente casas comerciales de toda Europa se instalaron en esta zona, haciendo los trabajos necesarios sobre la tierra para que sea en efecto un terraplén («bund» en inglés).
En el Bund de Shangai no puedes dejar de visitar el Banco de Desarrollo de Pudong, el Hotel Peace, la Aduana de Shanghái, el Edificio Asia, el Club de Shanghai, el Edificio de la Unión, el Edificio HSBC, el Edificio del Banco Ruso-Chino, el Banco de Taiwán, la Casa Sassoon, el Banco Yokohama Specie, y el Consulado General del Reino Unido.