El Talibán también autodenominado como «Emirato Islámico de Afganistán» es una facción político paramilitar fundamentalista islámica sunní de Afganistán.
Características
El movimiento talibán está compuesto fundamentalmente por miembros pertenecientes a minorías étnicas de las tribus pastunes, junto con voluntarios uzbekos, tayikos, punjabi, árabes y chechenos.
Historia
La milicia de los talibanes surgió en la década de 1990 en el norte de Pakistán. Fundado por veteranos de la guerra de Afganistán contra la invasión de la Unión Soviética, en plena guerra entre grupos muyahidines. Su principal jefe fue Mohammad Omar también conocido como Mulá Omar.
Los talibanes recibieron capacitación y suministros por parte del gobierno de Pakistán para combatir contra la Unión Soviética.
Entre 1996 y el 2001 gobernaron Afganistán con ayuda de Osama Bin Laden y Al-Qaeda.
Después de los ataques del 11 de septiembre en los EE. UU, los talibanes en Afganistán fueron bombardeados y se instalaron en el país soldados de la OTAN.
En el 2002 se reagruparon como movimiento insurgente y guerrillero en Pastunistán para luchar contra los gobiernos de Afganistán, Pakistán y la OTAN. Lograron controlar varias provincias.
Los insurgentes lograron conquistar nuevamente gobierno de su país cuando irrumpieron en la capital de Kabul, en agosto del 2021, debido al retiro de las tropas internacionales.
Ideología
Los talibanes siguen la doctrina islámica ortodoxa, cuya idea de sociedad está basada en interpretaciones estrictas de lo que debe ser la vida de un musulmán, la ley sharía, con el fin de combatir el «libertinaje», considerado habitual en las sociedades occidentales.
Los talibanes obligan a las mujeres a utilizar la burka en público y no se les permite trabajar ni recibir educación después de los ocho años. Tampoco se les permite ser atendidas por médicos de sexo masculino si no son acompañadas por un hombre.
Las mujeres están obligadas a comportarse con “dignidad”, deben caminar con calma y abstenerse de golpear sus zapatos en el suelo, para no generar ruido.
Las mujeres que se revelan ante los talibanes se enfrentan a flagelaciones y ejecuciones públicas. El adulterio es castigado con lapidación.
Para los hombres es obligatorio llevar turbante, barba, pelo corto y shalwar-kamiz. Además tienen que rezar cinco veces al día, preferiblemente en la mezquita.
Culturalmente prohíben las artes, música y el deporte.
Asimismo tienen permitido cortar las manos o bazos de la gente acusada de robar y flagelar a los bebedores de alcohol. A los homosexuales los sepultan bajo un muro de ladrillos. Realizan brutales palizas públicas a quienes no están de acuerdo, y ejecutan a quien infringe la ley y obligan a hacerlo de la misma mano de un familiar de la víctima.
A los chiitas y a la población hazara, los consideraban como «sub-humanos» y «no creyentes», y por tanto no tienen derecho a nada, y han sido masacrados en numerosas ocasiones.
También abogan por la defensa del honor mediante la venganza y la justicia. Por ello han realizado actos terroristas a gran escala y ataques suicidas en territorios enemigos como Estados Unidos, India y el Reino Unido.