Al norte de San Vicente y las Granadinas y bañada por las cálidas aguas del Mar Caribe se encuentra una hermosa y pequeña isla de origen volcánico, Santa Lucía, un lugar exótico y con una gran belleza natural cuyo nombre proviene de la romana Santa Lucía de Siracusa, ya que fue descubierta por Cristóbal Colón en su cuarto viaje en 1502, el 13 de diciembre, día de la mártir.
Gracias a la belleza natural de sus bosques y sus playas, Santa Lucía es un destino al cual concurren miles de turistas al año en sus viajes de vacaciones para disfrutar de la tranquilidad de la isla y relajarse en sus tranquilas playas.
Entre las ciudades que no puedes dejar de visitar en Santa Lucía encontramos a Castries, Vieux Fort, Soufriere, Gros Islet, y Marigot Bay.
Un ejemplo de lo exótico de la isla son los picos gemelos de 800 metros formados por la lava de antiguos volcanes, conocidos como Los Pitones, que son inaccesibles, pero que pueden ser observados a la distancia.
Pero sin duda en lo natural se encuentran los mayores atractivos de la isla. Las playas son excelentes para practicar deportes acuáticos como el windsurf y el esquí acuático y también brindan una excelente oportunidad de disfrutar de los corales y las tortugas, ballenas y caballos de mar que se pueden observar al bucear en sus aguas. Alejado de la costa, cerca de la zona de los cráteres, se encuentran las cascadas de agua sulfurosa conocidas como Cascadas Diamante, donde se pueden disfrutar de baños en las piscinas naturales y también de baños de barro, muy útiles para la salud de la piel.