El himno nacional de la República Dominicana es una composición musical patriótica que representa al país y que tiene la categoría de símbolo patrio.
Historia
Su letra fue compuesta por Emilio Prud’Homme y la partitura musical del himno fue creada por José Reyes en 1883.
Se interpretó por primera vez el 17 de agosto de 1883 en los salones de la Respetable Logia Esperanza Nº. 9, en la ciudad de Santo Domingo.
En 1897 se corrigió la letra original hasta llegar a la actual.
En 1934 fue adoptado como el Himno Nacional dominicano.
Letra
I
Quisqueyanos valientes, alcemos
Nuestro canto con viva emoción,
Y del mundo a la faz ostentemos
Nuestro invicto glorioso pendón.
II
¡Salve! El pueblo que, intrépido y fuerte,
A la guerra a morir se lanzó,
Cuando en bélico reto de muerte
Sus cadenas de esclavo rompió.
III
Ningún pueblo ser libre merece
Si es esclavo indolente y servil;
Si en su pecho la llama no crece
Que templó el heroísmo viril,
IV
Mas Quisqueya la indómita y brava
Siempre altiva la frente alzará;
Que si fuere mil veces esclava
Otras tantas ser libre sabrá.
V
Que si dolo y ardid la expusieron
De un intruso señor al desdén,
¡Las Carreras! ¡Beler!, campos fueron
Que cubiertos de gloria se ven.
VI
Que en la cima de heroico baluarte
De los libres el verbo encarnó,
Donde el genio de Sánchez y Duarte
A ser libre o morir enseñó.
VII
Y si pudo inconsulto caudillo
De esas glorias el brillo empañar,
De la guerra se vio en Capotillo
La bandera de fuego ondear.
VIII
Y el incendio que atónito deja
De Castilla al soberbio León,
De las playas gloriosas le aleja
Donde flota el cruzado pendón.
IX
Compatriotas, mostremos erguida
Nuestra frente, orgullosos de hoy más;
Que Quisqueya será destruida
Pero sierva de nuevo, ¡jamás!
X
Que es santuario de amor cada pecho
Do la patria se siente vivir;
Y es su escudo invencible: el derecho;
Y es su lema: ser libre o morir.
XI
¡Libertad! que aún se yergue serena
La Victoria en su carro triunfal,
Y el clarín de la guerra aún resuena
Pregonando su gloria inmortal.
XII
¡Libertad! Que los ecos se agiten
Mientras llenos de noble ansiedad
Nuestros campos de gloria repiten
¡LIBERTAD! ¡LIBERTAD! ¡LIBERTAD!